mayo 15, 2009

En vísperas del 17 de mayo


El miércoles que salía de clases recordé que había escuchado temprano que caían banderas del arcoiris colgadas de varios sitios en la universidad. Con mucha curiosidad me fui a asomar y lo confirmé. De la Biblioteca Carlos Monge cuelgan una bandera enorme y al lado un cartel que dice "Apuntáte al cambio". Otra bandera igual de grande que la pasada cuelga del edificio de Generales y otra más en Ciencias Sociales.

Obvio, me emocioné. Como 11 años después de haber entrado a este recinto, hoy me toca ver algo así... la diversidad sexual expresada en colores y en una fiesta toma el campus universitario como si nada, sin pedir casi ni permiso, como cotidiana, y parece saludar como si siempre hubiera estado ahí, y nadie parece sorprenderse ni dudarlo. Bueno, en realidad siempre estuvo ahí, la vida entera, sólo que no de esta forma.

Nunca es tarde.

Foto cortesía de Su (gracias!)

1 comentario:

andrea dijo...

"La esperanza tan dulce
tan pulida tan triste
la promesa tan leve

no me sirve
no me sirve tan mansa

la esperanza
la rabia tan sumisa
tan débil tan humilde
el furor tan prudente

no me sirve
no me sirve tan sabia
tanta rabia

el grito tan exacto
si el tiempo lo permite
alarido tan pulcro
no me sirve

no me sirve tan bueno
tanto trueno

el coraje tan dócil
la bravura tan chirle
la intrepidez tan lenta
no me sirve

no me sirve tan fría
la osadía

sí me sirve la vida
que es vida hasta morirse
el corazón alerta
sí me sirve

me sirve cuando avanza
la confianza

me sirve tu mirada
que es generosa y firme
y tu silencio franco
sí me sirve

me sirve la medida
de tu vida."
andrea